Hablo de la libertad de actuar y decir lo que queramos. Bien. Pues hay personas que no saben lo que es la libertad. Y manda huevos. Porque para una cosa que de verdad es nuestra se la vamos regalando a cualquiera.
Muchos pensáis que tenéis el derecho de decirle al resto lo que tienen que decir o callar. Lo que hacer o dejar de hacer. Pensáis que estáis en vuestro derecho de manipularles hasta tal punto de quitarles eso, la libertad.
Personas que se creen que porque una persona sea algo para el, bien sea amigo, amiga, novio, novia o 'X', lo que sea, pueden controlar cada uno de sus pasos exigiendo cosas y restringiendole el poder dar un paso al frente. (Cuidado! No se vaya a dar cuenta de que (obviamente) va a estar mejor sin tí y te mande a Parla) Personas que se desviven por saber en cada momento donde te encuentras. Personas que se enfadan cuando das el mínimo indicio de que te vales por ti mismo. De que eres alguien independiente. Cuando ven que te sueltas de la cadena de la cual te tienen atado.
¿Dónde está el error? El error lo cometen ambos. Uno por controlar y el otro por ser tan subnormal de dejarse controlar. Y yo, personalmente, odio. Y digo odio, por no decir que me cargaría a ostias, a esas personas que van de 'Dios' cortandole las alas al resto. ¿Porqué? Por que estamos en el siglo XXI y siguen habiendo 'mamás controladoras'(*) que no entienden que aunque estemos con una persona, esa persona es libre de hacer lo que le salga del mismísimo. Y para vuestra información; lo bonito de estar con alguien es dejarlo libre, y que así, siendo libre, decida LIBREMENTE estar a tu lado. Ahí es donde se demuestran las cosas. No prohibiendo. No juzgando. No enfadándose. Ni liandola. Ni manejando.
De nada.
(*)Dícese de las personas que te llaman al segundo de haberte visto, haciendo que quieren algo importante cuando en realidad solo quieren saber si estas haciendo algo sin su consentimiento. Cuidado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario